Dejemos de lado los ordenadores, los autocads, los revits, los Koolhas, los Gehrys, Calatravas, y empezamos a involucrarnos de nuevo en el mundo real, trabajemos para ‘la gente que nos requiere’, dejemos de emocionarnos de presentarnos a concursos donde ofrecemos gratis nuestro trabajo y empecemos a reconducir nuestra profesión desde la Formación, la Capacitación, la Crítica, el Compromiso y la Responsabilidad Social.
Una Arquitectura con un comportamiento socialmente responsable diseñará sus estrategias y establecerá procedimientos internos de gestión teniendo en cuenta no sólo la dimensión económica de sus acciones sino también otorgará Valor a las dimensiones sociales y medioambientales.
La Responsabilidad Social de la Organización es, además del cumplimiento estricto de las obligaciones legales vigentes, la integración voluntaria por parte de la organización, en su gobierno y gestión, en su estrategia, políticas y procedimientos, de las preocupaciones sociales, laborales y ambientales y de respeto a los derechos humanos que surgen de la relación y el diálogo transparentes con sus Grupos de Interés, responsabilizándose así de las consecuencias y los impactos que derivan de sus acciones.
Antes que Arquitectos, somos ciudadanos integrados en la Sociedad. ¡Volvamos la HUMANIDAD a nuestra labor como Arquitectos! ¡TAMPOCO ES TAN DIFÍCIL!...
Investigación y Difusión
Dr. Humberto González Ortiz
No hay comentarios:
Publicar un comentario