Llevo días recibiendo jitomatazos (aunque más
buenaventuras, la verdad!) ya que me consideran demagogo por hablar de las
cifras de pobreza en México en mis artículos (o reseñas más bien) sobre el
proyecto del nuevo aeropuerto, y de ese 70% de población pobre del mundo que
está excluida de la llamada Globalización financiera.
Hace rato ya que los países dejaron de tener sentido,
solo son una masa más o menos poblada de donde los grandes capitales pueden
extraer recursos, todavía hoy mucha gente echa la culpa a los habitantes de
Atenco de que este proyecto no se haya echado a andar antes.
El problema es que hace tiempo lo que hoy llaman
globalización, cedió el poder político de la democracia al sistema financiero y
a los financieros. En los años ochenta se comenzó a gobernar los países desde
las escuelas de negocios de Harvard y Oxford y todos lo aceptamos como bueno,
por eso hoy en día el poder financiero manda sobre todas las cosas, hoy votamos
políticos para que manden los financieros a su antojo.
Por eso más que abrirnos de piernas con X gigantescas, y
jardines de cactáceas, y Universidades, y Sanborns, y tecnología importada, y
sostenibilidad de mentiras, y sus miles y miles de hectáreas, y sus miles de
precarios empleos, y sus discursos vacuos, y su propaganda global ocultando las
vergüenzas... Necesitaríamos decir con claridad que este nuevo aeropuerto de
México solo será la entrada del capital internacional que hará de México el
call center hacia Latinoamérica... ¡Ni simbolismos, ni águilas devorando serpientes,
ni mega estructuras del súper primer mundo para un país de cuarta como México!
Las derramas económicas de estos mega-proyectos están más
que demostrado que no benefician a los países que las absorben y si al capital
que las propicia, lo enmascaran como inversiones en infraestructuras y solo
creamos accesorios para que ellos puedan movilizar sus capitales con mayor
facilidad y sin invertir un céntimo.
¿Qué el aeropuerto es necesario? ¿Qué hace falta que sea
tan grandote? ¿Qué es necesario hacer alarde de ostentación financiera ante una
población que pasa hambre? ¿Qué los análisis de arquitectura deben hacerse únicamente
desde el punto de vista arquitectónico y no social? ¿Qué si el concurso fue amañado
para ganara el yerno de Slim? ¿Qué si soy un crítico de arquitectura algo exagerado? ¿Qué si entonces qué debemos
hacer o qué?
Como dice Sebastián Mitl: <El problema que conlleva ser una ciudad global
es que los nuevos inquilinos elite tienen la visión y filosofía de que las
ciudades son un gran hotel de 5 estrellas, el cual debe servirles. Ya veremos
sutilmente con los años si este proyecto de ciudad se consolida (aún más de lo
que ya existe) y la ciudad de México se transforma en un lugar que estará al
servicio no de sus habitantes, sino de empresarios que no son residentes y solo
están “de paso”>(1)
Soy de una generación de derrotados, de los que siempre
hemos perdido y nos han hecho trizas, añicos, chiquitos, esparcidos… Sin
embargo, sigo siendo de esos necios que creen que vale la pena luchar (yo hago
arquitectura de palabras, sin ladrillos, ¡ya ves que aporte!) para que una
mayoría de seres humanos pueda vivir mejor, para que esa mayoría de pobladores
pobres pueda tener acceso también a eso que “algunos locos y anticuados”
llamamos: IGUALDAD...
Pero como siempre, ¡esta solo es la opinión de quien
escribe!
Difusión y Denuncia
Dr. Humberto González Ortiz©
(1)Artículo: AICM, LA PUERTA HACIA LA CIUDAD GLOBAL
MEXICANA. Consultado en septiembre de 2014 por la internet. http://disonante.mx/aicm-la-puerta-hacia-la-ciudad-global-mexicana/
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